Capitulo 4. Personas Conocidas

Sentían como que se desvanecían lentamente y su cuerpo iba tomando forma en otro lugar, de pronto tocaron el piso, se sentían muy mareados, los dos se doblaron y cayeron de rodillas, respiraban entrecortadamente, y se intentaban levantar del piso, Estela dirigio la miraba hacia una casa de ladrillos de regular tamaño, se veía muy mona, se veía resplandeciente, mientras la observaba y estudiaba se levantaba del piso, mientras Sky jalaba las maletas hacia donde estaba Griselda, dirigió la mirada para donde miraba su hermana y vio la cabaña, al lado de ella había un establo y un gallinero, olía a lavanda y a rosas lo cuál a Estela le gustaba mucho.

-Les diré quienes viven aquí- decía Griselda –Viven Evan Stanford y su esposa Vera, tienen tres hijos, el mayor es Arnold tiene 17 años, el de enmedio es Charlie tiene 15 esta en edad escolar y la más chica es Valery tiene 14, se podría decir que ustedes son familia pero muy lejana, aunque sus padres se llevaban excelentemente y los nombraron sus padrinos, claro que su tía les quito el derecho de cuidarlos pues el mismo día de la muerte de sus padres, decidio deslindarlos de este mundo pero ella tenía sus razones, ahora vamos- dijo avanzando delante de los chicos y mientras ellos la seguían

–¿Por qué mi madre y mi tía se vinieron de México?-

-Porqué su abuelo consiguió un trabajo aquí, su abuelo era mago pero su abuela no, su abuela era una hada, su madre y su tía son mitad hechiceras y mitad hadas, y ustedes también lo son-

-¿Osea que nos saldran alas?- dijo Sky horrorizado.

-A ti no, a tu hermana tal vez, dependiendo de que tantas proesas haga es que se le sederan sus alas-

-¿Mi madre tenía alas?- dijo Estela.

-Si y tu tía igual, cuando combates a rojos para salvale la vida a otras personas es una razón muy poderosa para que te sean otorgadas y aparte tu tía tiene un buen corazón y su madre lo tenía-

-Esto cada vez se pone más raro- dijo Estela rascandose la cabeza.

-Su abuelo era un excelente artista, por eso fue que atrajo a su abuela, muy pocos hijos de hadas viven pero la magia en su madre y tía era muy grande y vivieron; su padre era hechicero completo, su padre era un gran guerrero y su madre una sanadora, conocio a su madre en la escuela y allí empezaron a salir, aunque por obiedad su madre y tía eran muy hermosas hací que tu padre tenía competencia- dijo Griselda sonriente.

-¿Por qué la tía Bety no se caso?-

-Su tía se enamoro de un hombre lobo muy amable pero murió por salvar a tu tía-

-¿Hombre lobo?- dijo Estela –¿De los que se convierten en luna llena y todo eso?-

-Ellos pueden controlar cuando se transforman, claro que en luna llena se llenan mucho de poder, cuando aún no lo aprenden a controlar se transforman por el exceso se energía-

-Es muy triste que el amor de la tía allá muerto, ella se merece todo el amor del mundo- dijo Estela triste.

-A veces la vida no es justa con algunas personas- dijo Sky entre dientes.

-Su tía todavía tiene una vida por delante, todavía puede encontrar a alguien especial-

-Eso es verdad- concedió Estela

-Tengo una pregunta que hace un rato no me contesto...-

-Dime Sky-

-¿Por ser mitad hadas.... nuestra marca tiene esto?- dijo señalando las ramas de su lunar.

-Es verdad querido- dijo Griselada sonriente –Esas marcas las tienen las hadas, es como una diferenciación, cuando un elemento los escoja tendra color-

-Ya llegamos- dijo Griselda llegando al caminito de la entrada –Vamos, voy a tocar-

-¿Pero que dirán de nosotros?- dijo Estela señalando a Sky y ella.

-Ustedes no dirán nada, yo hablo y ustedes callan-

-Esta bien- dijeron los dos hermanos mientras Griselda tocaba la puerta y en ella se hacia una gran boca que preguntaba

–¿Quién llama?- dijo una voz femenina

-Griselada Connor- dijo con voz fuerte y segura, en eso se abrio la puerta y una mujer rechoncita apareció en la entrada.

-Hola Griselda, llegas justo a la hora de la comida- dijo sonriente la mujer, vio a los chicos cobre el hombro de Griselda y miro a Griselda -¿Quiénes son?- dijo curiosa.

-Larga historia- dijo Griselda -¿Nos permites pasar?-

-Claro, claro, pasen- dijo la mujer dejandolos pasar, cuando estubieron en el recibidor los chicos la apresiaron mejor, era de mediana estatura, su piel era blanca, sus ojos verdes, su cabello era cafe-rojizo, cuando sonreía se le hacían oyuelos profundos, los miraba curiosa –¿Ya me diras Griselada?-

-Ella es Estela Wolf Gómez y el Sky Wolf Gómez- la mujer casi se desmaya y con el mandil que traía puesto se empezo a hechar aire, Griselda la sostuvo por el brazo y pudieron ver Estela y Sky ver su marca de venado en su brazo, tenia un color azul zafiro muy lindo.

-Ustedes son...... hay santo cielo.... hay madre mia- Vera estaba apunto de desmayarce haci que Estela la sostuvo también por el brazo mientras Sky esperaba el momento en que se desmayara para sostenerla completa

-Vera controlate, respira por favor Vera- rogaba Griselda.

-Hay dios se va a desmayar- aseguraba Estela –Señora Vera por favor no se desmaye- Estela la empezo a mover y Vera empezaba a respirar profundamente.

-Es que pense que Bety los había desaparecido- se safo de Griselda y abrazo a Estela –Dios estas tan grande, mirate eres tan parecida a tu madre, tu sacaste todo lo hada de ella, estas perfecta- decía mirando a Estela mientras lloraba, la solto y abrazo a Sky –Y tu mi niño estas tan grande y fuerte hay eres tan parecido a Ian, tus ojos son iguales a los de el, pero su madre es la que más se nota en ustedes- dijo soltandolo y limpiandose sus lágrimas -vengan... vengan- los guio haci el salón era muy colorido, la mesa era de madera, los utensilios eran algo rusticos pero la casa era muy acogedora, los muebles eran de madera bien lijados y barnizados, Estela y Sky veian todo con una sonrisa, les recordaba a la granja donde vivian antes, Estela dirigio la mirada hacia la chimenea y había un hombre donrimido en un sillón, Estela jaló a Sky para que dirigiera la mirada hacía el hombre dormido, la Señora Vera se dirigio hacia donde estaba el hombre lo desperto y el hombre se quito sus gafas de leer, las puso en la mesita que había al lado y se levanto del sillón, la señora Vera le susurró algo, dirigio la vista hacía donde estaban parados Griselda y los chicos, el hombre abrió los ojos como platos.

-Por Dios Santo, estan.... por dios.... están enormes- dijo abrazando a los dos –Mirenlos estan tan grandes, estas hermosa mi niña- dijo dirigiendose a Estela –Estas muy fuerte hombre- le dijo a Sky

-Hola Señor Stanford- dijo Estela sonriendole, el señor Stanford era alto, delgado, de cabello negro profundo, ojos negros, de piel cobriza se notaba que era muy buena persona.

-Hola Señor- dijo Sky siendo amable.

-Hola Evan- dijo Griselda –Tu me dijiste un día que quién los encontrara que te los trajera y pues aquí estan- Griselda le sonrió a Evan y el sonrio complacido.

-Muchas gracias Griselda, muchas gracias-

-Bueno los dejo, es tarde y tengo que arreglar las cosas para las clases de este año-

-¿Donde nos quedaremos?- dijo Sky

-Se quedaran aquí niños, por supuesto que se quedarán aquí- dijo la Señora Stanford sonriente.

-¿No será mucha molestía?- dijo Estela mordiendose el labio.

-Claro que no- dijo la señora Stanford tronando los dedos –Estarán muy bien aquí, te quedaras con Valery- señalo a Estela –Y tu con Charlie- señalo a Sky –Será maravillo, será....-

-Madre.. madre aparecieron unas maletas en mi...- bajo corriendo las escaleras un chico alto, de cabello cafe, ojos negros, y muy delgado, los observo por unos momentos con cara de ¿Qué rayos?, Estela y Sky observaron su cuello y tenía un lunar negro de un ciervo, las astas le marcaban le subian hasta el inicio de la cara. -¿Quiénes son ustedes?-

-Emm.... yo soy Estela Wolf Gómez-

-Yo soy Sky Wolf Gómez-

-Esperen .... esperen... ¿Ustedes son mis primos perdidos?-

-Supondo que no, porque ya no estamos perdidos- dijo Estela sonrriendo.

-Supongo que ya no- dijo Charlie sonriedo –Aunque es raro tenerlos aqui ¡Rayos!, ¿Mi madre no se infarto?-

-Que cosas dices hijo- dijo la Señora Stanford sonriente

-Le dire a Anthony que estan aquí- dijo Charlie dirigiendose de nuevo a las escaleras.

-Deberías enseñarle a los chicos sus habitaciones-

-Claro, vamos-

-Yo me retiro- dijo Griselada –Los vere en la escuela jovenes-

-Hasta luego Profesora- dijo Estela abrazandola.

-Hasta luego Profesora- dijo Sky abrazandola después que Estela.

-Vamos chicos, vayan a sus habitaciones, después bajen para la cena- dijo la Señora Stanford.

-Adios- dijo Estela dirigiendose a las escaleras con Charlie y Sky los siguió.

-Adios- dijo Sky antes de salir de la habitación para subir las escaleras detrás de Charlie y Estela.

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